lunes, julio 26, 2010

Inmortalidad inventada


No me gustan los médicos, ni los exámenes médicos, ni las urgencias médicas, ni los medicamentos... nada que tenga que ver con el área de medicina tradicional me gusta... es algo que he repetido durante años, porque nunca necesité (salvo excepciones obviamente) estar revisando mi salud de forma constante.


Dentro del último año, comencé con visitas continuas al médico después de que por el asalto tuve que rehacerme un dedo, porque empecé con sensaciones de salud distintas a las habituales, porque presenté cuadros de dolores de cabeza por estrés, porque ahora me atacan cólicos renales... maldición! No soy inmortal y tampoco soy inmune a todas las enfermedades existentes en el mundo.


He tenido que controlar bruscamente mi fobia a las agujas, porque me trastorna el hecho de pensar que me atraviesan la piel haaaaaa y la sangre, y el dolor y ahhhh que miedo!!!! Lloraré, como siempre lo hago cuando me muestran una jeringa... de a poco me he ido entregando al "sistema" de atencíones clínicas, pero NO es de mi agrado, aunque sea por mi bien.


Me retan porque no me he hecho los exámenes... es que tontamente pensé que se pasaría solo, pero por lo visto no es así... Durante mucho tiempo pensé que no me pasaría nada nunca, que estas cosas le pasaban sólo al resto de las personas, pero por lo que me estoy dando cuenta, soy una mortal común y corriente, con 30 años que se me están notando porque ya no logro tener el cuerpo atlético de hace unos años atrás, porque me canso, me arrugo y me enojo con más facilidad hahahaha (mentira)


Prometo hacerme un examen esta vez... porque el otro examen que tengo pendiente no puedo hacérmelo porque no logro encontrar la orden que me dieron antes del terremoto ¬¬ ajajaja... soy una irresponsable, lo sé. Línchenme.

martes, julio 13, 2010

Imagina




La Fran está haciendo sopas de letras, igual como las hacía yo cuando niña... heredó ese don ñoño de mí. Siempre me gustó hacer puzzles, crucigramas, rompecabezas y cuando estaba en la U descubrí los Sudokus. Todos los juegos de ingenio me agradan y me encanta que la Fran también disfrute de ellos, porque aunque Usted no lo crea, ve menos tele, y menos ganas le dan de jugar al computador.


No pretendo que mi hija sea una retrógrada que no sabe nada de tecnología, pero creo que hay que entregarle esa información de a poco, para que desarrolle su imaginación, para que sus rasgos cognitivos se desarrollen de mejor manera y por tanto permitir a su cerebro que potencie habilidades que en muchos niños y niñas quedan escondidas (o bloqueadas) por mantenerlas descansadas por mucho tiempo... Los juguetes existen por algo y seguirán existiendo mientras obliguemos de una u otra forma a nuestros niños a ocuparlos.


Las Barbies eran mi fascinación, me hubiese encantado tener toda la colección, el auto, la casa, el supermercado, la oficina, etc... Lo mismo con los Playmobiles... pero no pude y tuve que inventarme autos y casas y supermercados con plumavit de las cajas de la TV nueva o del nuevo mini componente de esos años, con envases de shampoo, o con las sillas del comedor... la imaginación daba para mucho...


Y como la imaginación es algo que puede ser desarrollado a destajo, y mientras más imaginación una persona tenga, más soñador es... por tanto verá la vida de una forma más positiva, menos complicada y más alegre...


Hay un comercial que dice "ensuciarse hace bien" y pucha que creo que es cierto... Jugar a la comida con barro, revolcarse por una loma de pasto, jugar a la pelota y quedar con las rodillas verdes... En verano era entretenido jugar a las bombas de agua o manguerearse en el patio, correr con los pies descalzos por la playa, ir al campo y perseguir gallinas, pollitos, lechones o gansos. Subirse a los árboles de nísperos, sacar maqui de la mata, cosechar uvas...


Soñar e imaginar son conceptos, intangibles, intocables pero no inalcanzables... imaginar no cuesta nada (y soñar tampoco). Por eso no pretendo que mi hija deje de imaginar a corta edad, y en cierta medida la obligo a desarrollar su imaginación, a que crea en que todo es posible... a los 7 años es difícil proyectarse hacia el futuro. Ser grande aún está muy lejos...



domingo, julio 04, 2010

Yo mujer, tú fútbol


Si bien no soy una persona fanática por el fútbol, este Mundial FIFA 2010 me hizo vibrar, principalmente porque nuestro país se presentaba como uno de los buenos equipos en competencia.


Chile se paralizó por completo durante esas 2 horas por cada partido… Y me quedaron unas dudas grandes… ¿qué pasó con esas mujeres que supuestamente íbamos a quedar de lado porque nuestros hombres sólo iban a hablar de fútbol? ¿Será real que las mujeres se sentirían desplazadas por un balón? ¿Cuántas mujeres prepararon sopaipillas, panqueques, desayunos o ensaladas para que sus hombres vieran el mundial?


Yo disfruté la permanencia de nuestra selección a concho, me dediqué a ver casi todos los partidos por internet, en la mañana, en la pega y a medio día. Disfruté de cada gol, junté las laminitas en el álbum virtual de Panini, hice salud por la Selección Chilena y compartí con mis amigos y colegas los triunfos, los goles, las entrevistas, las tarjetas amarillas, los offsides, las ofensas a los árbitros…


Facebook dio a entender que muchas de nosotras estábamos participando de esta celebración. Creo que no quedaba otra que hacerse parte del interés común… casi como un adelanto a los festejos por el Bicentenario de Chile, con banderas colgadas desde las ventanas de las casas, carros del centro vendiendo vuvuzelas y nuestras mascotas vestidas en tricolor.


La estigmatización de las “minas” anti-fútbol no se vio reflejada durante este Mundial, por lo menos no dentro de mi ambiente. Sí debo reconocer que me enojé en un momento en casa porque las mujeres se dedicaban a hablar de cosas de minas durante el partido Chile-Brasil jajja. Nuestros ojos se vieron deleitados con aquellos estupendos jugadores, piernas trabajadas, pectorales marcados bajo esos nuevos modelos de poleras ajustadas. Lo bueno de ver fútbol, es tener entretenida la vista y obviamente, ver fútbol de excelente calidad.


Pudimos haber perdido a nuestros hombres durante un mes, o haber decidido compartir esta pasión con ellos. Así como ellos pacientemente nos acompañan al shopping, nosotras debemos entender que un Mundial, y sobretodo si juega tu país, es un hito cada 4 años en la historia de la pasión de multitudes. A mis 30 años, disfrutar de un Mundial y ver a Chile luchando por posicionarse como buen equipo me llenó de orgullo.


Y aunque se me apagó la chispa mundialera cuando quedamos eliminados, sigo estando al tanto de lo que sucede con los equipos. Todo ha vuelto a la normalidad, ya no canto el wakawaka, y mis nicks ya no hablan de fútbol… Una linda experiencia, una entretenida vivencia… Por ahora a esperar una semana más y ver quiénes se llevan la Copa.